Preguntó la revista El Duende a una serie de artistas.  “Es lo que conecta las ideas con la creación y transformación de realidades” contesta Olafur Eliasson (Dinamarca 1967); esta es la respuesta que más nos ha gustado. Cuánto hubiéramos dado por asistir en 2003 en la Sala de las Turbinas de la Tate Modern, al espectáculo de Weather Project, en el que un sol prominente hacía sucumbir con su grandeza a todos los visitantes que integraban con su presencia la muestra. Gustavo Torner (Cuenca 1925), a punto de cumplir los 90 años, sigue relacionando el arte con la belleza. Su paso por el mundo del arte en España fue decisivo, se relacionó con la élite de la segunda mitad del siglo XX y perteneció al círculo de Fernando Zóbel, conoció a José Guerrero y a Robert Motherwell en un viaje a Nueva York, haciendo que su relación con las artes le convirtiera en un artista muy polifacético; también fue asesor de la Fundación Juan March asesorando exposiciones, como la mítica de Joseph Cornell de 1984, cuando la sede era el único espacio dedicado al arte contemporáneo. Hoy Gustavo Torner es noticia porque ha inaugurado dos exposiciones y su Fundación sigue cerrada.

 Eugenio Ampudia (Valladolid 1958) desestima que la postura del artista deba estar relacionada con la belleza y manifiesta que el artista debe ser molesto con el poder, que debe gestionar ideas potentes. En El Matadero de Madrid se exhibe  Cada palabra es como una innecesaria mancha en el silencio y en la nada, prosaico titulo para una exposición que realmente sorprende a sus visitantes.

Si reflexionamos un poco sobre los derroteros del mundo del arte, sin duda se ha llegado al paroxismo de sus experimentos, desde Dora Maar punteándose con una navaja entre los dedos abiertos de las manos, hasta la pieza compositiva de John Cage que interpretó en el más absoluto silencio David Tudor en 1962 en Nueva York, hasta los pinceles de cuerpos de jóvenes de Yves Klein llamados Antropometrías, todos, hasta la terrible escultura compuesta por oro y excrementos de Terence Koh; todo parece indicar que tenemos que volver a las pinturas murales del pleistoceno para volver andar por el camino de la evolución en el arte y plantearnos ciertos límites. Sin límites deambula Marina Abramovic por la locura de las performances, esta vez en Rio de Janeiro, después de su paso por Teatro Real de Madrid en el que celebró su propio funeral. Esta artista, en su trabajo con el cuerpo, ha hecho todo tipo de actuaciones, desde practicar el onanismo en público, defecar, desnudarse, hasta permanecer en silencio sentada en una silla ante una mesa en el vestíbulo del MOMA en la primavera del 2010, y frente a ella una silla vacía en la que el publico podía sentarse a observarla en silencio sin hablar y sin moverse; hubo enormes colas por experimentar sensaciones frente a la diosa, hubo quien manifestó sentir una paz interior inenarrable, hubo quien se puso a llorar de emoción (la verdad es que el mundo interno de cada uno es abismal, igual que la necesidad de creer y sentir, y la de superar barreras). Marina siempre es noticia, ahora pasea su mundo por Brasil y habla de la muerte como un gran momento de la vida, no le falta razón.

 En el Centro de Arte contemporáneo de Móstoles hay una exposición de Jeremy Deller (Londres 1966), un artista polifacético y sorprendente, su instalación se titula Sacrilegio, y es una réplica hinchable de las ruinas de Stonehenge. Además de otras obras que componen una muestra irónica e iconoclasta sobre el artista, este personaje pasó dos semanas en el verano de 1986 en The Factory de Warhol al ritmo del pop art, muy presente en sus propuestas. Una propuesta más acorde con lo políticamente correcto es la del Museo de arte Ruso que se ha inaugurado en Málaga, nos morimos de ganas de ir. Parece que la iniciativa vino por un grupo de empresarios rusos que viven en la Costa del Sol y han promovido su implantación para superar la falta de conocimiento que del arte ruso hay en el resto del mundo; la próxima sede será en La Habana en Cuba (sospechosa analogía mental…). El museo de San Petesburgo originariamente se creó en 1895 por un decreto del zar Nicolás II, años antes de la revolución y asesinato, dicen que la idea de crear una pinacoteca fue vislumbrada por la élite rusa a mediados del XIX, y en la decisión final influyó una obra de Iliá Repin que conmovió al entonces zar Alejandro III. La historia completa de una gran nación a través de su arte, desde el siglo X al XXI; tenemos suerte de ser un país que aprecie la oferta cultural para enriquecer sus ciudades y Málaga parece haberlo entendido así.

 Terminamos ensalzando la figura Rafael Sanz Lobato (Sevilla 1932-Madrid 2015), maestro de Cristina García Rodero que ha fallecido en Madrid a los 82 años, siempre en la búsqueda de ese momento especial de la vida cotidiana de las gentes sencillas de los pueblos pobres para ser retratados y encontrar belleza en esa cotidianeidad que con el paso de los años pasa a ser testimonio de una España rural, como aquellas procesiones en Aliste (Zamora), fiestas tradicionales de los pueblos, semanas santas… Y volvemos a Egipto para apreciar el trabajo de desarticulación de grupos vinculados a financiar el yihadismo mediante la venta de obras de arte del antiguo Egipto, que fueron robadas durante la Primavera Árabe en el 2011, más de 4.000 piezas fueron sacadas del país de forma ilícita y ahora entre Estados Unidades y Francia y sus brigadas contra el expolio del Patrimonio Histórico Artístico han regresado a su lugar de origen, hablamos de sarcófagos, momias, barcas funerarias, relieves esculpidos, piedras calizas etc.  La ceguera que produce el fanatismo es propia de la necesidad de cubrir las necesidades más primarias. En nuestro blog cada semana más: https://www.tasararte.com/