Evitar palabras conflictivas. Ese es el propósito que se ha hecho el Rijksmuseum de Ámsterdam. Hay palabras que hoy en día pueden resultar ofensivas aunque en su momento no lo fuesen, la sociedad y lenguaje evolucionan y vocablos como negro, indio, enano, esquimal o moro son algunos ejemplos. Martine Gosselink, responsable del departamento de Historia del Rijksmuseum y responsable del proyecto, tiene una lista de 23 de éstos y modificará el título de cerca de 300 obras de su colección en 2016. Por ejemplo, el término esquimal es peyorativo, significa comedor de carne cruda, para referirse a ellos usan el término “inuit”, que significa persona, y es más correcto. La dificultad del proyecto está en encontrar las palabras adecuadas, hay títulos como Jovencita negra (1895-1922), un óleo del pintor holandés Simon Maris (1873-1935) fáciles de adaptar al lenguaje actual y que en la página de web del Rijksmuseum figura ya como Mujer joven con un abanico. Sabiendo que no cambia el significado ni la intención del autor al realizar la obra, consideramos que es una iniciativa loable; además, ninguno de estos cambios supondrá borrar parte del significado de la obra, ya que muy pocos artistas las titulaban. Las inscripciones se deben, en general, a los conservadores o historiadores que las han trabajado, los nuevos títulos acompañarán a los antiguos en el archivo para que nadie se confunda, no se trata en ningún caso de falsear la historia, sino de ser cauto y respetuoso. Algunos museos van tomando nota; por ejemplo, el Museo Nacional de Antropología prepara una renovación de la cartelería para el 2016, tanto de contenidos como de diseño.
Gran Timonel así le apodaban a Mao Zedong (Mao Tse-Tung), y grande es la escultura que le han erigido en la provincia de Henan en China, un retrato sedente de 37 metros de altura, realizada en acero y hormigón bañado en oro, ¿presupuesto?, 3 millones de yuanes, unos 425.000 euros financiados por empresarios nostálgicos del maoísmo (aunque parezca increíble). En China la figura de Mao sigue estando muy presente, con sus partidarios y detractores; prueba de ello son las cerca de 150 escuelas del Ejército Rojo que han proliferado por el país en los últimos años, y que abogan por recuperar la “educación patriótica” de su época. Aun así no debió parecerle políticamente correcto a las autoridades, ya que ha sido demolida por “carecer de la aprobación oficial”, ello ocurrió pocos días después de que imágenes de esta efigie se publicaran en la prensa de todo el mundo, decisión que nos parece más que acertada, no por lo que represente la figura de Mao en sí, sino por el dudoso gusto de la obra.
Ai Weiwei y los refugiados de Lesbos. De mejor gusto nos parece la obra de este gran artista y su proyecto de abrir un taller en la isla griega de Lesbos como homenaje a los refugiados. “La frontera no está en Lesbos, sino en nuestra mente y en nuestro corazón” dice Ai Weiwei sobre el conflicto. Su idea es reunir a estudiantes de China y Alemania para que elaboren ‘in situ’ trabajos relacionados con la crisis migratoria.
Pistoletto, Blueproject y Arte Povera. Hasta el 27 de marzo tenemos de plazo para visitar la exposición que presenta la Blueproject Foundation sobre este artista representante del Arte Povera. Una selección de piezas que componen una retrospectiva de su obra que abarca desde mediados de los setenta hasta hoy. Michelangelo Pistoletto (Biella, Italia, 1933) normalmente en sus obras trabaja con el happening, le concede tanta importancia a la acción como a la obra en sí, trabaja con todo tipo de materiales de la vida cotidiana: ropa, periódicos, cartón…, y con una especial presencia del espejo en su obra: “El espejo se rompe de mil maneras, pero siempre lo refleja todo, nunca miente y cada persona es a la vez una forma y un reflejo de los demás”, dijo el artista en una entrevista en Barcelona el pasado noviembre cuando se inauguró la exposición.
Días de vinilo. Es el título que lleva la exposición en el Patio Herreriano en Valladolid y que finaliza este 10 de enero a pesar de haber sido ampliada, no queda tiempo para visitarla pero sí para hablar de ella. Traza una genealogía de las relaciones entre arte contemporáneo y música a través del diseño gráfico de más de 1500 portadas de discos desde los años 40/50 del pasado siglo hasta la actualidad, poniendo énfasis en aquellos momentos en que artistas de vanguardia de reconocido prestigio han colaborado activamente con músicos coetáneos. El ejemplo que se nos viene a la cabeza es la famosa banana pintada por Andy Warhol para el disco de Velvet Underground & Nico de 1967, cuando todavía era el manager del grupo, pero hay obra también de Richard Hamilton, Robert Rauschenberg, Dan Graham, Mike Kelley, Julian Opie o Damien Hirst. El pop art inglés fue uno de los movimientos que dieron importancia a este soporte para realizar sus obras.
El Guggenheim y las cifras de 2015. Los grandes museos españoles cerraron el año con buenas cifras de asistencia en general, y destaca sobre todos ellos el Museo Guggenheim Bilbao con una cifra de 1,1 millones de visitantes. Desde su inauguración en 1997 no había tenido tal afluencia, motivada principalmente por las exposiciones de Jean-Michel Basquiat y Jeff Koons; desde aquí felicitamos a la pinacoteca y a su director Juan Ignacio Vidarte.
Y nos despedimos con un abrazo, el del artista Juan Genovés. Llegó al Palacio madrileño del Congreso de los Diputados el cuadro de Genovés titulado “El Abrazo”, considerado uno de los símbolos pictóricos de la Transición, cedido por el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía sin fecha de devolución. También conocido como “Amnistía”, lo pintó en 1976 y mide 151 x 201 cm. Estas son las noticias que destacamos esta semana. Gracias por estar ahí, hasta la semana que viene en: https://www.tasararte.com/blog/.