Siempre reflexionamos para intentar comprender. Y eso es lo que vamos a intentar esta semana. El Museo del Prado no localiza 885 obras, da angustia pensar todo el patrimonio artístico que se ha perdido o no se localiza por los avatares de la historia, la desidia estatal y la falta de conciencia respecto a la valía cultural e histórica de los distintos elementos artísticos que nos legaron nuestros antepasados. Y es que la conciencia de conservación del patrimonio histórico-artístico es de principio del siglo XX, es una pena no haber tomado conciencia mucho antes. Parece que el Prado va a continuar con sus tareas de seguimiento y control de los depósitos constituidos en otras instituciones, dentro de lo que se conoce como “Prado Disperso” y hay un plan de actuación diseñado para la revisión “in situ” de las obras depositadas en comunidades autónomos y analizar su estado, condiciones de conservación, seguridad, acceso a las mismas. Nunca es tarde si la dicha es buena.
También queremos reflexionar sobre la creación de espacios, y vuelve el nombre de Alejandro de la Sota a poblar las noticias de los diarios. Esta labor de memoria la emprende uno de sus hijos que quiere revisar el legado de su padre y lo que aportó en una España diferente a la que vivimos ahora. Hay dos espacios que resaltan: La fábrica de leche Clesa, en la Avda. Cardenal Herrera Oria en Madrid y en peligro de demolición, y el gimnasio del Colegio maravillas de Madrid, curioso ¿verdad? en vez de mencionar sedes de bancos o grandes edificios de oficinas. Y es que la arquitectura y su obsesión por resolver problemas de espacios con escuadra y cartabón también se extiende a gasolineras, colegios, fabricas etc, etc, etc… y esos edificios que vemos a diario y a los que apenas prestamos atención tienen detrás un trabajo importante de creatividad, eficacia edificativa y estética sencilla, conseguida y pergeñada por algún arquitecto consciente de su responsabilidad.
Y comenzamos hablando de dilemas y sin más queremos mencionar el enorme que tuvimos al intentar comprender el mensaje de los performances que tuvieron lugar en el Museo Centro de Arte Reina Sofía de Madrid, este último fin de semana hubo un evento titulado “Performing Gender”. Cuatro espacios del Museo se llenaron con cuatro eventos distintos que postulaban una mirada crítica a las políticas de género y sexualidad desde las herramientas de danza y performance, y asistimos a ellas con una gran expectación. Admiramos la labor de Manuel Borja-Villel y su equipo, desarrollando en el centro de Arte una labor de máxima originalidad y una oferta alternativa de eventos y exposiciones que nada tiene que ver con el ordenamiento cronológico al que estamos acostumbrados. El Museo ofrece exposiciones cuyo montaje gira en torno al desarrollo de un discurso, además de un discurso poco común, y siempre intenta estar a la última y traer artistas independientes, diferentes cuya manera de hacer arte abarca la toma de conciencia de conflictos sociales, políticos y de máximo interés. Gracias por leernos. https://www.tasararte.com/