El título viene a cuento de una noticia que nos ha llamado la atención y nos ha hecho reflexionar. Resulta que ha aparecido, casi por casualidad, un lienzo que se daba por desaparecido de nada más y nada menos que siete por cuatro metros, es decir, veintiún metros cuadrados, el tamaño de un pequeño apartamento moderno; pero eso sí, despiezado en veintiún fragmentos. Los trozos corresponden a la obra “El desembarco de Fernando VII en el Puerto de Santa María” pintado en 1827 por el pintor neoclásico José Aparicio Inglada (Alicante, 1773-Madrid, 1838), representa al rey Fernando VII y su recepción por el duque de Angulema en 1823. Se dio por desaparecido en el incendio que tuvo lugar en 1915 en el Palacio de Justicia. El hallazgo se produjo durante los preparativos de una exposición en la actual sede del Tribunal Supremo para recordar el incendio donde tantas obras de arte se perdieron: muebles, esculturas, cuadros, todo tipo de enseres… Los restos aparecieron en el Museo Cerralbo, ese pequeño y coqueto enclave en el barrio madrileño de Argüelles que supone un testimonio de la cultura del siglo XIX. Es evidente que la obra no se quemó, alguien se hizo con ella, parece ser que Enrique de Aguilera y Gamboa, marqués de Cerralbo (Madrid, 1845 – 1922), la compró en El Rastro (en realidad pertenecía a las Colecciones Reales, no a ningún vendedor privado de El Rastro). En cuanto a la partición en fragmentos hay dos hipótesis, una: que se hizo con la intención de mayores beneficios por la venta de los retratos por separado; y la otra: que fue el propio marqués quien la hizo para ocultar la actitud sumisa de Carlos María Isidro ante la injerencia militar reflejada en el cuadro, ya que era un acérrimo carlista. Sin saberlo con certeza, nos decantamos por la primera hipótesis, ya que, independientemente de lo carlista que fuese, también era historiador, arqueólogo y sobre todo sensible al arte y con un gusto exquisito; no nos encaja que fuera él quien lo hiciese.

Pasamos de lo histórico a lo más moderno, el Festival Ars Electrónica, que en la edición de este año cuenta con una importante presencia española. Se celebra en la antigua fábrica de tabaco de Linz, (el primer gran esqueleto de acero de Austria), comenzó como un proyecto piloto y se ha convertido en los últimos 30 años en uno de los festivales de arte digital más importantes del mundo, inaugurado en 1979, también podemos incluir el Prix Ars Electronia como captador de tendencias de arte y tecnología, el Ars Electronica Futurelab, como puerta de unión entre la economía y la ciencia, y es que es el tipo de Museo del futuro, el nuevo Ars Electronica Center. La presencia española se plasma en el proyecto Naked Veriti, una exposición comisariada por Javier Galán, que reúne a los artistas Néstor Lizalde, Félix Luque & Iñigo Bilbao y Pablo Valbuena, autores de tres ambiciosas obras, creadas y producidas especialmente para el festival gracias al patrocinio del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y Acción Cultural Española (ACE).

Y se presenta una semana realmente intensa en Madrid con dos acontecimientos que no podemos dejar de perdernos, por un lado tenemos en el Matadero la Feria Summa Contemporary, del 10 al 13 de septiembre, que reunirá a más de 50 galerías y expositores, casi la mitad procedentes de países como EE.UU., Argentina, Colombia, Canadá, México, Francia y Reino Unido. Y por otro lado tenemos el evento Apertura Madrid Gallery Weekend, organizado anualmente por ARTE_MADRID, una celebración para el arte y la cultura. Las galerías que forman parte de la asociación celebran el inicio de la temporada artística con la inauguración conjunta de sus exposiciones y con un amplio programa de actividades, visitas a museos y colecciones, encuentros y fiestas en la línea de los eventos que se celebran en otros grandes núcleos del panorama internacional como el Gallery Weekend de Berlín o el Choices Collectors Weekend de París. Vemos como va calando por fin el coleccionismo, convirtiéndose en un mercado en auge con cada vez mayor participación en el juego de la economía; además de invertir, disfrutas, ¡qué más se puede pedir!

Más para comentar, como por ejemplo que el museo de piedras pintadas de Agustín Ibarrola abrirá ¿sus puertas? este mes en Muñogalindo, Ávila, creación del artista con 115 piedras pintadas, un ejemplo más de land art con el que nos deleita este apreciado artista, que dice que quiere seguir creando hasta el final.

Como siempre, son muchas más las noticias que dejamos de comentar que las mencionadas, pero estamos limitado por el espacio y el tiempo. Te agradecemos que hayas llegado hasta el final y la semana que viene te contaremos más noticias de la actualidad cultural en nuestro blog www.tasararte.com.