Tasararte ha tenido un año magnifico, lleno de trabajo y alegrías; de verdad, esto de las redes sociales funciona, y sobre todo ser honrados, justos y amar profundamente lo que hacemos. Somos un gran equipo. Comenzamos tasando colecciones con algunas piezas de primer orden que hubo que expertizar y autentificar, seguimos atendiendo a clientes que nos han traído obras de Tintoretto, algún cuadro no tan autentico de William Adolphe Bouguereau, hemos tasado obras de museos muy singulares, colecciones de arte textil, colecciones de muebles antiguos y alfombras, alguna tasación de gemología, mucha obra de Joaquín Sorolla, colecciones fuera de España, venta de obra de Miquel Barceló, localización de obra de Anselm Kiefer; en fin, que estamos pletóricos y tenemos buenos pronósticos para el año que viene.
La semana se presenta exigua de noticias de arte aunque hay dos exposiciones que queremos ver y cuya temática nos atrae. El Museo de Arte Contemporáneo de la Coruña (MAC), esponsorizado por Gas Natural Fenosa, expone hasta el próximo 29 de Noviembre una muestra retrospectiva de la obra de un creador chino, Wang Guangyi (Harbin 1957), un artista símbolo de la nueva China que nos muestra en sus veintinueve obras y a lo largo de un extenso recorrido, la evolución política de China tal y como la ha vivido el artista a sus casi 60 años. Sus periplos vitales le hicieron sobrevivir al drama del comunismo y la revolución cultural. Las obras son eclécticas y sorprendentes, la muestra tiene el evocador título de “Las reliquias de los creyentes”, la iconografía cristiana es una presencia constante en sus creaciones.
Otra muestra interesante la ofrece la Fundación Botín en Santander, esta vez es el evangelio minimalista y control del azar según Sol LeWitt (USA 1928 – 2007) este creador, padre del arte conceptual y del minimalismo, muestra un universo creativo muy particular, lleno de permutaciones en el que la estructura musical es una clave para entender su mundo artístico personal; su propuesta parte a finales de los sesenta como una reacción visceral contra el Expresionismo Abstracto, su radicalidad pone en tela de juicio la figura del autor. Los artífices de esta iniciativa, Benjamin Weil, Director artístico del Centro Botín, y John Hogan, Comisario de la muestra, quieren hacer sentir al espectador la inmersión de las propuestas americanas en el inicio de la segunda mitad del siglo XX, en plena Guerra Fría; Interesante y sobre todo un reto saber captar lo que un movimiento ofrece en una época determinada. La muestra también cuenta con obras de otros diecinueve artistas seleccionados entre cuatrocientos postulantes a la convocatoria de la Fundación, el minimalismo y lo conceptual siguen expandiéndose, reinterpretándose y repitiendo su frescura.
Los medios reivindican la falta de libertad de la que siguen careciendo los artistas cubanos, Tania Bruguera sigue dando que hablar, preparó en La Habana una performance en la que leía en voz alta “Los orígenes del totalitarismo” de Hannah Arendt (Tasararte ama profundamente la obra de Arendt), la artista convocó a colegas que quisieran acompañarla y nadie se presentó, ¡¡¡¡el miedo acompaña a los artistas cubanos!!!, quienes si se presentaron fueron oficiales y gente amenazante de la seguridad del Estado, quienes la sometieron a un acto de repudio, y ¡¡¡¡nadie dijo nada!!!; tampoco la dejaron pasar a las galerías de la bienal, sus propios colegas y galeristas le prohibieron el paso, sus desplantes y silencios a la falta de libertad garantizan la buena marcha de la censura y la represión. Parece que las nuevas generaciones de artistas cubanos son dóciles y admiten con resignación el ser vigilados y censurados; con pavor por ser detenidos, los medios hablan de una putinización del arte (en referencia a Putin), es increíble que todavía exista ese miedo y esa falta de libertad, quizá porque en un país tantísimos años ahogado por un régimen paternalista y represivo a la población le sea difícil salir del síndrome de Estocolmo.
Vamos a hablar de artistas, quédense con el nombre de María Cañas (Sevilla 1972), el Centro Andaluz de arte contemporáneo le dedica una muestra en la que la artista exhibe sin pudor su talento crítico con fotomontajes y videoinstalaciones que forman en conjunto de obras con una sorna contradictoria. Risas en la oscuridad estará hasta el 11 de octubre. José Hernández (Tánger 1944 – Málaga 2013) inunda las salas de exposiciones temporales de la Academia de Bellas Artes de San Fernando con su particular mundo onírico surrealista (si Fernando Terán le ha abierto la puerta, por algo será) la obra procede de una gran exposición antológica de la artista que continúa en Valencia. Una producción de personajes inquietantes de pieles rugosas y en colores ocres.
Y acabamos con la conmoción que anuncia Francisco Calvo Serraller cuando al caminar por los pasillos del Museo del Prado, uno se encuentra con las obras que ha donado Placido Arango, en concreto habla del Descendimiento de Pedro de Campaña (1503-1580), habla de D. Placido y de su amor al arte con una poética increíble “el amor (al arte) auténtico está siempre volcado en el secreto: es una acción intima que no aspira a ninguna respuesta”….”quien ha podido diseminar estas complementarias joyas capaces de brillar con luz propia en este abigarrado tesoro…. Estos dones solo pueden ser fruto de una pasión” Hablar así de los cuadros ya insertos en la exposición permanente del Museo del Prado, que ha donado el magnate, es muy poético. Gracias Paco. En nuestro blog cada semana más https://www.tasararte.com/blog/